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El viaje de Telémaco

Explorando juicios e intervenciones

 Hola a todos

Quería compartir una transcripción de un curso de verano que impartí junto a un compañero, Víctor Pérez, hace unos tres años. El curso estaba centrado en la formación de la identidad, que es mi principal tema de investigación. Una parte del mismo estaba dedicado a la intervención. Lo que quiero mostrar es un ejemplo de intervención usando la metodología de modelado propia de la DBM. Dicha metodología es la base del proyecto de investigación en el que participo desde hace 2 años, centrado en facilitar transiciones que conllevan cambios de identidad, concretamente en mi caso, pasar de ser estudiante a ser profesional.

Igualmente esta metodología de modelado es la base de muchas de nuestras clases, especialmente la de HHSS, también la de Psicología de la Infancia y algunas sesiones de DA. Diferentes contenidos pero procesos similares.

 Como sé que la intervención suele ser algo que no se suele abordar en las clases (muchas veces ni siquiera en las investigaciones, siempre es más fácil describir que intervenir) quería mostrar un breve ejemplo, a ver qué os parece.

 Ahora que lo leo detecto una serie de errores importantes por mi parte. Ja... imagino que tener que intervenir frente a un grupo de personas no es lo mismo que intervenir únicamente con tu cliente, pero también noto  que entonces no tenía la misma sensibilidad a ciertos temas como ahora (o eso creo).

 Puede que a muchos os suene a chino, o puede que no, puede que tenga sentido. El desafío es doble: 1, encontrar dónde está la intervención, en qué se basa, ¿es familiar la metodología? y 2), ¿dónde creéis que están mis errores? 

 Creo que puede ser especialmente interesante para mis alumnos de HHSS y de Psicología de la Infancia y Adolescencia, sobre todo al estar centrado en un tema tan importante en la adolescencia como son los juicios. En DA es igualmente interesante porque una perspectiva típica en la disciplina implica juzgar a los estudiantes a partir de su desempeño en las clases, siguiendo una serie de estándares. 

Bueno, espero que resulte interesante, y si no, pues nada, no lo leáis.

 Un saludo

 

Alejandro 

 DINÁMICA DE EXPLORACIÓN DE JUICIOS

Alejandro: Sí. Hemos hecho este camino, juicios, evidencias, inferencias. Lo que os estoy pidiendo ahora es que preguntéis, dado que ahora eres una persona diferente, si volvieras a esa situación, a qué estarías atendiendo, a que más podrías atender. Porque está claro que ahí estabas atendiendo a un tipo de evidencia determinada. Pero a qué otro tipo de evidencia podrías atender. Dada tu experiencia actual. Está claro que en este momento tenías una serie de alternativas.

 

Alumna: Qué más podrías tener en cuenta.

 

Alejandro: Sí, con lo que tú sabes ahora de la vida, con lo que tú sabes ahora acerca de ti, a qué otras cosas podrías ahora atender, y desde las otras cosas a las que podrías atender, cómo podrías resumir ese juicio. ¿Entendéis? Es el camino inverso.

 

Alumna: Pero sin tener en cuenta el juicio anterior.

 

Alejandro: El juicio lo tienes en cuenta, porque estás partiendo de él. Todo tiene que ver con ese juicio inicial, hemos empezado con un juicio que sabéis, y ¿cómo lo sabes? Y sabéis en qué momento inicial surgió. Y también sabéis que eres una persona diferente ahora, y si vuelves ahora a esa situación, que es algo que ya estáis haciendo, y empiezas a plantearte: “yo estaba atendiendo a los demás, lo que decían los demás, pero ahora si yo estuviese en esa situación, a qué otras cosas podría atender?”.

 

Alumna: ¿A qué?

 

Alejandro: Explóralo y lo sabrás.

 

Alumna: No, es que no lo entiendo. Es que a lo mejor si me das un ejemplo lo entiendo mejor. Si yo pongo soy una persona... borde, yo que sé, y digo pues en este momento me doy cuenta que era borde, y tengo que volver a ese momento para saber a qué atendería, a qué otras cosas atendería ¿pero para qué?

 

Alejandro: Dime un juicio tuyo.

 

Alumna: Soy desordenada.

 

Alejandro: Vale. Y. es desordenada, ¿eso qué quiere decir?

 

Alumna: Desordenada.

 

Alumna: Lo sabe todo el mundo.

 

Alejandro: ¿Cómo sabes Y. que eres desordenada?

 

Alumna: Que como lo sé, pues porque no encuentro todos los días.

 

Alejandro: ¿Qué? Perdona, no entiendo.

 

Alumna: Que cuando entro en mi cuarto lo sé.

 

Alejandro: Entras en tu cuarto, y qué pasa cuando entras en tu cuarto.

 

Alumna: Tengo que saltar (risas). Y creo que lo sé cuando está mi madre constantemente detrás: recoge tu habitación, recógelo.

 

Alejandro: Pero ¿tu madre te está diciendo que recojas tu habitación?

 

Alumna: Si no yo creo que estaría en un estado normal. Es que no puedo.

 

Alejandro: O sea, vamos a ver. Tú eres desordenada.

 

Alumna: Si no sería una persona normal para mí.

 

Alejandro: ¿Tú eres desordenada?

 

Alumna: Sí hijo, sí.

 

Alejandro: ¿Y sabes que eres desordenada porque tu madre te está diciendo que guardes las cosas...? ¿No?

 

Alumna: Es que lo tendrías que haber visto.

 

Alejandro: Yo te digo lo que tú me dices.

 

Alumna: Es que son más cosas, pero yo fui consciente de que era desordenada porque la pobre estaba detrás de mí.

 

Alejandro: Así que por una parte está tu madre diciéndote que recojas las cosas, y por otra parte tu ves que hay cosas por ahí...

 

Alumna: Sí, sí, sí.

 

Alejandro: ..que tienes que ir saltando, ¿no? (risas). ¿Algo más acerca de cómo sabes eso?

 

Alumna: Porque cuando lo ordeno ya no lo encuentro.

 

Alejandro: Cuando lo ordenas ya no lo encuentras. O sea, que a todo eso lo llamas “soy desordenada”. ¿En qué momento te diste cuenta que eras desordenada?

 

Alumna: Momento, momento, pues en ése en el que mi madre me decía: recoge tu cuarto, recoge tu cuarto, recoge tu cuarto. ¡Coño! Es verdad, tengo que recogerlo.

 

Alejandro: Ese momento, ¿tienes un momento concreto, puntual?

 

Alumna: Desde que era adolescente.

 

Alejandro: ¿Desde?

Alumna: Que soy adolescente.

 

Alejandro: ¿Desde que eras adolescente? (risas)

 

Alumna: Ahora también.

 

Alumna: Desde que lo soy.

 

Alejandro: ¿Y tenías alguna edad concreta? ¿12, 13?

 

Alumna: Un poco más, 14, 15.

 

Alejandro: Es importante concretar.

 

Alumna: Es que no lo sé. Pero 15.

 

Alejandro: 14, 15 años. De manera que tenemos a Y. con 15 años..

 

Alumna: Muy mona.

 

Alejandro: Muy mona, monísima. ¿Vale? Y tenías a tu madre, que te empieza a decir en ese momento, o tú empiezas a ser consciente que te dice, que eres desordenada.

 

Alumna: Más o menos. Yo creo que soy consciente más tarde. Pero la pobre empieza a estar detrás de mí por esa época. Pero soy consciente más tarde.

 

Alejandro: ¿Más o menos cuándo empiezas a ser consciente?

 

Alumna: No lo sé, la verdad, no lo sé, no me acuerdo. Pues con... 19.

 

Alejandro: Digamos que de 15 a 19 tu madre está diciéndotelo, y luego llega un momento que... Cuando tú dices que te das cuenta de que tu madre dice que eres desordenada, eh.. qué quiere decir eso de que empiezas a ser consciente. ¿Te empieza a joder que tu madre te lo diga?

 

Alumna: Bueno, pero no veas cómo.

 

Alejandro: O sea que hay una serie de consecuencias.. o sea, antes te daba igual. La diferencia está en que antes te daba igual que te dijera y de repente llega un momento en que te ha dejado de...

 

Alumna: No es que no me dé igual, sino, te hace pensar que si tantas veces te lo dice la pobre tiene razón.

 

Alejandro: ¿Tiene razón sobre qué?

 

Alumna: Pues sobre que soy desordenada.

 

Alejandro: Sobre que eres desordenada (ríe). Es un ejemplo muy bonito acerca de cómo un juicio que le están diciendo... ella duda aquí de ser desordenada..

Alumna: No...

 

Alejandro: .. pero su madre empeñada en que es desordenada, porque probablemente la que tiene que ordenar el cuarto es ella (su madre). Vale, es un buen ejemplo. Eh.. dado que eres una persona.. ¿cuantos años tienes, 23 años?

 

Alumna: 23.

 

Alejandro: Son 23 años, han pasado cinco años desde entonces ¿no? imagino que como persona has aprendido cosas, tienes nuevos intereses, inquietudes, nuevos aprendizajes, ¿no? ¿O eres igual que cuando tenías 18 años? ¿Eres diferente no? Me podrías decir: soy diferente en estas cosas. Vale. Si ahora pones esa situación aquí, vale, sitúate en la habitación. Tu madre está diciéndote coge esto, no sé cómo te lo dice, ¿cómo te lo decía?

 

Alumna: Enfadada me lo dice.

 

Alejandro: Te lo dice enfadada.

 

Alumna: Me decía que no iba a salir, que como no lo cogiese no salía, que soy una guarra, que no sé qué, y me lo tiraba todo encima de la mesa y me lo tiraba al suelo y me decía ahora lo recoges. Me estoy sincerando ¿eh chicas?

 

Alejandro: Y volviendo a esa situación con lo que sabes ahora de ti, con lo que sabes después de todo este tiempo, ¿a qué otras cosas podrías atender en esa situación?

 

Alumna: (pausa) A qué otras cosas... no sé.

 

Alejandro: Antes, por ejemplo, decías que atendías casi exclusivamente a lo que decía tu madre. Luego te dabas cuenta de que había ropa por ahí. Pero también me has dicho más cosas, me has dicho que tú sabías dónde estaban las cosas. Cuando tú sabes dónde están las cosas, ¿a qué estás atendiendo ahí?

 

Alumna: A mi orden ¿no?

 

Alejandro: A tu orden. ¿Y cómo es tu orden?

 

Alumna: Desordenado.

 

Alejandro: El orden es algo subjetivo. El orden no está en el mundo sino está en la persona que está percibiendo el orden. Es como la belleza. La belleza no está en el mundo, la belleza está en el ojo del observador. Entonces ¿tú podrías atender a tu orden?

 

Alumna: Pues sí.

 

Alejandro: Si atiendes a tu orden específico, ¿puedes atender a tu manera de ordenar?

 

Alumna: Sí. Pero el conflicto sigue estando ahí.

 

Alejandro: Entonces, ¿cuál es el conflicto real?

 

Alumna: Pues mi mamá.

 

Alejandro: ¿Cuál es el conflicto real?

 

Alumna: Pues eh.. mi manera de (p.12 22:20) ) a mí misma. Yo vivo en su casa.

 

Alejandro: Vale, pero a partir de eso, a partir de esa situación y a partir de lo que sabes ahora, ¿qué cosas podrías concluir?

 

Alumna: Pensar he pensado muchísimo.

 

Alejandro: ¿Qué podrías concluir?

 

Alumna: ¿Que qué podría concluir?

 

Alejandro: Sí, con todo esto.

 

Alumna: Pues que viendo con qué hacen juicios sobre mí misma, puedo (p. 12 22:52) las personas me digan.

 

Alejandro: No.

 

Alumna: ¿Por qué no? Pero en este caso sí. Si vives en mi casa el orden será mío. Pero es que vivo en la suya. Tengo que respetarlo.

 

Alejandro: Una cosa es que la respetes, ¿cómo la podrías respetar?

 

Alumna: Pues ordenando como ella quisiese.

 

Alejandro: ¿Qué más cosas podrías hacer?

 

Alumna: Nada más, no lo entiendo.

 

Alejandro: No lo entiendo. Hay veces que el contexto es el contexto que es. El propio contexto impone sus límites. Pero ¿cómo está tu juicio ahora?

 

Alumna: No, ahora las cosas las tengo claras, antes no. Antes tenía que hacerlo porque tenía que hacerlo, y porque era así. Ahora tengo que hacerlo por otra circunstancia.

 

Alejandro: ¿Y cuál es tu juicio.. ahora?

 

Alumna: ¿A qué te refieres?

 

Alejandro: El juicio respecto el orden.

 

Alumna: Pues que soy...

 

Alejandro: ¿Cuál es tu juicio?

Alumna: Es que no sé, yo sigo siendo desordenada.

 

Alejandro: ¿Sigues siendo desordenada?

 

Alumna: Sí para lo que todo esto es, o sea para lo que realmente.. lo que es ser ordenada, ser desordenada, sí que soy.

 

Alejandro: Vale, modifiquemos un poco. Una cosa curiosa aquí es que cuando ella habla de su desorden, sin saberlo está usando una regla de medir. Un estandar. ¿Qué es para ti un estandar de orden? ¿cuál es el ideal de orden con el que estás comparando?

 

Alumna: Pues una habitación limpia, pulcra, donde no hay nada por encima...

 

Alejandro: ¿Hay alguien que tenga una habitación asi?

 

Alumnas: No.

 

Alejandro: ¿Alguien más?

 

Alumna: Yo lo intento.

 

Alumna: Yo también lo intento.

 

Alejandro: Es decir, entiendes un poco tu manera de medir, tienes una manera de medir en la que para que las cosas estén ordenadas tienen que estar casi perfectas, tiene que estar así, todo lo que no esté así, desorden.

 

Alumna: ¡Es eso!

 

Alejandro: Entonces hay un pequeño espacio así de orden y todo esto desorden (en la pizarra). Y eso es como lo estás haciendo. Que tú eres ordenada o desordenada.

 

Alumna: Desordenada.

 

Alejandro: Desordenada.

 

Alumna: Pero sólo en mi cuarto.

 

Alejandro: Pero sólo en tu cuarto. O sea que hay cosas en las que no. ¿Cómo está tu juicio ahora? ¿cómo lo resumirías?

 

Alumna: No sé, igual ¿no?

 

Alejandro: No sé, tú verás.

 

Alumna: Yo sigo pensando que soy una persona desordenada en ese aspecto.

 

Alejandro: Pero eso no me lo has dicho antes.

 

Alumna: ¿Qué te he dicho?

Alejandro: Que tú eras desordenada, y ser desordenada es ser desordenada en todo.

 

Alumna: Ah no, en todo no, en eso sí.

 

Alejandro: En eso sí.

 

Alumna: Pero también es por eso porque una persona como para llegar al desorden.. con lo cual.. comparo y allá ellos, que controlo mi orden.

 

Alejandro: ¿Hay algo nuevo que después de todo esto..?

 

Alumna: Pues sí, me acabo de dar cuenta cuando lo he dicho.

 

Alejandro: Bueno, nos podríamos extender más. Pero tampoco es ahora lo principal. ¿Habéis pillado el proceso? Vamos a hacerlo y con esto vamos a terminar la secuencia. Ella ya está “trabajada” (risas), pero sí me gustaría que tuvierais todos la exploración completa. Así que una vez llevad a la persona aquí, si tú volvieras ahí, ¿a qué otras cosas podrías atender? E id subiendo. ¿Vale?

 

7 comentarios

Anónimo -

Hola Alejandro:


Esto se sale un poco del tema que tratas, pero permite explorar un poco en el tema de la identidad, que me interesa mucho.


¿Cómo formamos nuestra identidad?.
No te quiero hablar de lo que dicen los libros de Ps. Social o de la Personalidad, sino de lo que yo considero, a la luz también del conocimiento, pero de modo personal.


A lo largo de mi vida he tenido, y ahora tengo un montón de identidades, perteneces a distintos grupos, vas haciendo transiciones de una a otra, primero eres hija, y eres obediente, desordenada, cariñosa responsable....


Además eres niña, luego adolescente con sus correspondientes atributos.

Luego eres estudiante de una carrera ( y eres divertida, estudiosa, solidaria...), te preparas para un futuro profesional.


Luego pasas de estudiante a profesional, te enamoras, tienes novios, te casas, tienes hijos..... trabajas, estudias...



¿Entonces dónde está la identidad?


¿Son esas diferentes identidades, o es lo que permanece de ti, no estable, al menos en mi caso, sino cambiante, es decir algo interno que hace que tú te encuentres a ti misma en los diferentes roles sociales, y momentos, pero que te hace reconocerte y , también gustarte o no gustarte???????



Yo creo que mi identidad se está formando y transformando constantemente, con la base de unos valores que acepto y defiendo, según las relaciones que establezco, las influencias que recibo, y cómo yo conecto con mi entorno, con qué emoción, con qué motivación yo acepto o rechazo lo que se me ofrece. Y también con cuánta valentía o dejadez yo cambio algo que no va bien, o que no me satisface.


Por eso esas intervenciones que haces para hacer consciente a la gente de su identidad y de cómo en un momento se es más consciente de que somos de un modo y cómo podemos entender y cambiar algo...., me parecen muy pertinentes, porque es eso: me configuro según lo social, pero puedo cambiar algo por mí mismo.
Pero para cambiar hay que hacer mucho esfuerzo... y se requiere quizás un poco ¿?? de ayuda.


Bueno creo que esto es un lío, no sé si he dicho algo o no he dicho nada, pero ahí queda, por si alguien quiere seguir dándole vueltas.


Besos

Asun -

Hola Alejandro:
Bien, claro que entiendo, recuerdo , comparto y aprecio tu metodología, bien lo sabes tú.



Respecto al doble desafío que nos propones, veo que la intervención está en ir haciendo preguntas pertinentes que hagan a la persona pensar sobre sí misma, sobre los procesos que utilizó en un momento determinado, de modo que se haga consciente de algo respecto de su identidad, y de las influencias del contexto en la formación de esa identidad, además de los cambios que se han producido en ella y por qué. Más o menos.



Respecto a tus fallos.....en general felicidades; has mejorado mucho por lo que conozco de ti, por el proceso que te seguido durante los tres años que compartí asignaturas contigo, ya te he dicho a veces que desde mi primera asignatura a la tercera el año pasado he tenido la suerte de ver ese proceso de desarrollo .



Sobre todo has mejorado en cuanto a la forma de dirigir , ahora eres mucho menos directivo, con lo que el proceso es mucho más incómodo para el que está enfrente de ti, pero mucho más rico a la hora de crear consciencia, ya que la crea partiendo más de sí mismo y menos de que lo que tú le dices.



Pues eso, que los fallos estaban en tu impaciencia en ese momento.



Te transcribo un par de párrafos, donde he visto que ahora habrías intervenido de otro modo, o eso creo.


1.-
Alejandro: Digamos que de 15 a 19 tu madre está diciéndotelo, y luego llega un momento que... Cuando tú dices que te das cuenta de que tu madre dice que eres desordenada, eh.. qué quiere decir eso de que empiezas a ser consciente. ¿Te empieza a joder que tu madre te lo diga?

Aquí has sido muy directivo, tenías que dejarla a ella, a través de preguntas más cortas que llegara a la conclusión de cuándo ha sabido, ha tenido consciencia de que es desordenada y por qué. De este modo se lo has dado hecho, dándole la pista de que une la consciencia del desorden con el hecho de que le moleste que su madre se lo diga.



2.-
Alejandro: O sea que hay una serie de consecuencias.. o sea, antes te daba igual. La diferencia está en que antes te daba igual que te dijera y de repente llega un momento en que te ha dejado de...


Creo que ahora dirías mejor: ¿crees que hay una serie de consecuencias?


Ah, me imagino que te gustará esta transcripción, ya que se van apreciando un poco distintos niveles de conciencia típicos de la adolescencia y de un poco más tarde.
Un beso

Asun

Aure -

Hace poco regañaba a mi hijo Iñaky (20 años) por el desorden de su habitación. Hijo...¡tienes la habitación completamente desordenada! y me contesto: ¿desde tu concepto de orden o..desde el mío?.hmmm ¿Será cosecha propia o tendré yo algo que ver en su razonamiento?. Me gustó tu artículo. Un beso. aure

Laura -

Hola Alejandro

Creo que la intervención está en que ella explore con tu ayuda sobre un juicio que tiene sobre sí misma y se de cuenta o descubra de cómo ha cambiado su percepción de ese juicio tras esa exploración guiada.

Aunque ella ha construido su juicio a partir de su experiencia, eso no le impide que tras una revisión o exploración del mismo, darle un nuevo sentido a ese juicio.

Es decir, que con la DBM, tú fuiste modelando la situación con el fin de crear unas respuestas específicas, pero es aquí donde yo veo uno de los posibles errores, porque hay momentos en los que se induce la respuesta. Por ejemplo, en la parte en que dices: “¿Y tenías alguna edad concreta? ¿12, 13?”, creo que estás ofreciéndole una orientación demasiado concreta, y también por ejemplo, cuándo dices: “Es importante concretar”, creo que induces a que aunque ella no esté segura de la edad, tenga que concretar: “Es que no lo sé. Pero 15”.

Por otra parte, creo que algunas respuestas fueron algo tajantes, como si quisieras oír una respuesta que ella no te estaba dando, como si las respuestas que ella te daba no te sirvieran. Por ejemplo en esta parte:

“Alejandro: Entonces, ¿cuál es el conflicto real?
Alumna: Pues mi mamá.
Alejandro: ¿Cuál es el conflicto real?
Alumna: Pues eh.. mi manera de (p.12 22:20) ) a mí misma. Yo vivo en su casa.
Alejandro: Vale, pero a partir de eso, a partir de esa situación y a partir de lo que sabes ahora, ¿qué cosas podrías concluir?
Alumna: Pensar he pensado muchísimo.
Alejandro: ¿Qué podrías concluir?
Alumna: ¿Que qué podría concluir?
Alejandro: Sí, con todo esto.
Alumna: Pues que viendo con qué hacen juicios sobre mí misma, puedo (p. 12 22:52) las personas me digan.
Alejandro: No.
Alumna: ¿Por qué no? Pero en este caso sí. Si vives en mi casa el orden será mío. Pero es que vivo en la suya. Tengo que respetarlo.”

Supongo que se podrían haber hecho más preguntas para ir reconduciendo la exploración, con el fin de conseguir modelar una respuesta a la que hubiera llegado por sí misma, pero no sé. Imagino que al ser un curso y una demostración, los objetivos cambiarían un poco, apremiaría el tiempo, se atendería a otras cosas…, etc., no sé.

Tampoco sé si estos serán los errores que decías, si la intervención se basa en lo que he escrito al principio...

Y en cuanto a si la metodología me es familiar..., claro que sí, creo que es más o menos la que utilizas en tus asignaturas…, y he estado en todas, así que la he experimentado bastante, jejeje :-P

Un saludo

Alejandro -

Hola Mary

Gracias por el comentario, como ves ya lo he añadido.

Cuando dices que estás hecha un lío, ¿qué quieres decir? ¿a qué te refieres? ¿hecha un lío respecto qué...?

Otra curiosidad, cuando dices que la metodología es familiar, ¿cuándo la has experimentado o crees que la has experimentado o aplicado?

Sí que hay errores, entiendo lo que dices de la recapitulación final, es uno de ellos. El final es demasiado abrupto, pero porque era una demostración de una pauta de exploración siguiendo un modelo, no era una intervención en sí, si lo hubiera sido una recapitulación hubiera sido muy pertinente. ¿Quién crees que hubiera tenido que recapitular? ¿yo o ella? ¿por qué?

Bueno... gracias de nuevo por la participación...

Un saludo

Alejandro

Mary -

Hola Alejando!
he intentado un montón de veces poner este comentario en tu blog, en la historia de la
conversación con la chica, pero debe ser que no me deja. Ahí va.

Lo primero que me gustaría decir es que estoy echa un lío... tanto como la protagonista
de la historia...
En cuanto a la metodología, me parece muy familiar y además me parece una de las
mejores maneras de construir conocimiento. No se dan soluciones, se plantean
cuestiones que le hacen reflexionar e ir elaborando sus propias ideas.
No se si habrá algún error, pero quizá yo hubiera hecho una recapitulación final... por si
alguien se ha perdido por el camino como ha sido mi caso.
Un saludo!

Laura -

Yo diría que el desafío es triple, jejeje :-P porque es muy largo...
A ver si para mañana me lo puedo leer... ;-)
Saludos